
Es sólo pensar que te puedo perder y se me hace un nudo en la garganta. Es sólo pensar en mi vida sin ti y mis ojos se ahogan en lágrimas. Te llevo tan dentro de mí que hasta me duele.
Ya no sé si esto es sano, pero no me importa. No me importa porque te quiero demasiado y el dolor de perderte sería insoportable, tan fuerte como mil cuchillos clavados en mi pecho.
Te llevo tatuado en el alma.